Este fin de semana, os dejamos con una lista de los criterios que se utilizan habitualmente para definir la cerveza. Como veréis, una cerveza puede cumplir con varios a la vez. Esperamos que os sea útil.
Tipos de cerveza
Ingredientes.
La cebada puede haberse mezclado con otros cereales, como el maíz, la avena o el trigo. Siendo así, puede llamarse “de trigo” o “de avena”, mientras que si el único ingrediente utilizado es la cebada, puede denominarse “100% malta”.
Los ingredientes también determinan el color de la cerveza, que puede ser rubia, negra, roja, turbia, etcétera. Por ejemplo, la cerveza negra suele adoptar este color porque se fabrica con maltas tostadas. El aspecto también depende del filtrado que se haga de los cereales y de su fermentación. Las cervezas de cebada y de baja fermentación son las más rubias y claras.
Fermentación.
Según el tipo de fermentación, la cerveza se divide en Lager (baja fermentación, las más habituales en España) y Ale (alta fermentación). Las cervezas Lager son ideales para refrescarse: en general tienen baja graduación y son claras y gaseosas. Tal vez por eso son las que más se consumen en el mediterráneo. Las del tipo Ale, en cambio, son las más populares en el centro de Europa: son más oscuras, prácticamente no tienen gas, y su sabor es mucho más intenso.
Fabricación.
El procedimiento de fabricación de la cerveza también puede ser significativo. Por ejemplo, las cervezas llamadas “Doble malta” son aquellas en las que la cantidad de malta utilizada es mayor de lo habitual, de manera que su graduación también sube. Por otra parte, suelen destacarse, más que las cervezas negras, las cervezas hechas con grano ligeramente tostado, como en el caso de la Leffe Bruin, la primera cerveza con que abrimos este blog.
Para acabar, existe un tipo de cerveza llamado Rauchbier, en castellano “ahumada”, porque se deja que el humo de la leña impregne de sabor el grano. Por otra parte, algunos fabricantes hacen las cervezas utilizando maquinaria de vapor.
Otro día nos sumergiremos en el mundo de las cervezas que se sirven calientes, ya que la manera de calentarlas también recibe nombres y modifica el sabor de la bebida.
Procedencia.
Como todos los alimentos de calidad, algunas cervezas han querido desmarcarse del resto mediante una DO (Denominación de Origen). El caso más común es el de las cervezas de abadía: suaves al paladar, oscuras y de alta graduación. Existen multitud de cervezas con Denominación de Origen. Lo más interesante, sin embargo, sería poder viajar a países como Alemania o Bélgica, donde es común que cada pueblo o comarca disponga de una marca de cerveza propia.
Una vez hecha la clasificación, ya os podéis hacer una idea de vuestra cerveza favorita. ¡Lo comprobaremos en nuestra próxima encuesta!
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